Sendero Riolago – Candemuela
Actividad de senderismo en el Parque Natural de Babia y Luna para recorrer el sendero Riolago – Candemuela
Nos desplazamos al municipio de San Emiliano, Parque Natural de Babia y Luna, para disfrutar de uno de los rincones más cautivadores del noroeste de España. Conocida por su paisaje montañoso y su rica herencia cultural, Babia es un destino ideal para los amantes del senderismo.
El punto de partida de la actividad se encuentra en el pintoresco Riolago de Babia (1290 m), un pueblo que respira historia por sus cuatro costados. Nada más comenzar destaca la imponente silueta del Palacio de los Quiñones. Desde aquí, continuamos la marcha en dirección este para cruzar un pequeño puente sobre el arroyo de Riolago. Tras cruzar, y justo después de la ermita del Cristo de la Puente, llegamos a un cruce donde tomamos la pista de la derecha.
Después de aproximadamente 3 kilómetros, encontramos otro de los puntos de interés: la ermita de Nuestra Señora de Lazao. Este pequeño y solitario templo tiene sus orígenes en el siglo XIII. La ermita destaca por su sencillez, con una fachada de piedra y una torre campanario que se eleva sobre el valle. El entorno natural que la rodea es otro de sus atractivos, con vistas panorámicas a los campos y a las montañas de Babia. Su ubicación la convierte en un lugar perfecto para una breve pausa antes de continuar el camino.
Siguiendo la ruta, llegamos a la carretera CL-623, que cruzamos para entrar en el pequeño y acogedor pueblo de Villasecino (1170 m). Caminamos por la calle principal del pueblo y al llegar a la última calle a la izquierda, tenemos la oportunidad de contemplar la casona solariega de los García Lorenzana, construida en el siglo XVII.
En Villasecino…
Tras un breve recorrido por sus calles, continuamos nuestra ruta, tomando el camino hacia la derecha, donde encontramos una señal que indica el próximo destino: La Majúa.
El camino transcurre entre suaves ascensos y descensos, ofreciendo vistas panorámicas de las montañas que rodean la comarca. Durante los 4 kilómetros que separan Villasecino de La Majúa, la naturaleza se convierte en la protagonista absoluta del recorrido. Poco antes de llegar al pueblo, el camino cruza una pequeña carretera asfaltada, y la ruta continúa por un sendero que nos dirige hacia el sur. La cercanía de las montañas del macizo de Ubiña crea un entorno idílico, donde los paisajes se tornan más imponentes.
En La Majúa (1245 m), cruzamos por puente el río homónimo y tomamos la carretera hacia el sur, en dirección a San Emiliano. Tras caminar 1 kilómetro por ella, encontramos un desvío a la izquierda donde tomamos el camino que nos lleva a Candemuela (1195 m).
Parque Natural de Babia y Luna
Constituye una excelente representación de los ecosistemas de la cordillera Cantábrica. El macizo calizo de Peña Ubiña destaca desde el punto de vista geomorfológico, ecológico y paisajístico. Destacan el gran valor y la elevada diversidad de su vegetación, motivada por sus grandes variaciones orográficas y litológicas, en la que llaman la atención diversas comunidades de alta montaña e interesantísimas turberas y humedales. Alberga una rica y singular flora entre la que sobresalen ciertas especies endémicas y especies con gran interés biogeográfico. La variedad vegetal motiva la elevada riqueza en especies de fauna. Entre ellas, destaca la presencia esporádica del oso pardo cantábrico.